viernes, 26 de febrero de 2010

EL CONTROL EN LOS MEDIOS

Esta semana, el diario progre y prisaico EL PAÍS nos regalaba un editorial bastante interesante, el cual mostraba el talante totalitario del mismo. En él tacha a todo medio de comunicación que no aboga con las ideas “progresistas” de ultras.


Y es que al diario del imperio prisaico, parece molestarle que medios de ala conservadora, liberal o simplemente de derechas tengan presencia y sean protagonistas en la TDT o en Internet. Han sido muchas las décadas en las que los medios progres no han tenido competencia al tener concedidas las licencias de tv, concedidas en su día por el gobierno de González y continuada después por el gobierno de Aznar. De hecho, sólo hay que darse un paseo por nuestra TDT para darse cuenta, cuál es la empresa que ostenta más canales de radio y tv emitiendo a través de la TDT, Cuatro, CNN+, cadena SER, los cuarenta principales, etc… Todos ellos pertenecientes al GRUPO PRISA, claro.


Hoy por hoy, el telespectador u oyente de radio tiene un abanico más amplio donde elegir qué programa de debates ver, qué contertulios quiere oír, o simplemente qué canal sintonizar. Es tan fácil como que es el dueño de su mando a distancia, y es el que otorga o quita audiencias, es decir, es libre de elegir. Esto el GRUPO PRISA, parece no llevarlo demasiado bien. Pero no se trata tan solo de competencia mediática y empresarial, sino también de competencia ideológica lo que parece importarle en este caso a EL PAÍS y por ende, al grupo al que pertenece. Y es que no entienden que existan medios de comunicación con una ideología completamente distinta a la suya, y que éstos tengan la posibilidad de salir en antena a comunicar. Ellos se creen en posesión del poder mediático como buenos izquierdistas, creando así la dictadura de los medios de comunicación. La dictadura de su medio y de su ideología. Dictadura felizmente perteneciente al pasado, y que poco a poco, año tras año, se va superando. Aunque ellos lo encajen mal.


Y es que no termina aquí el talante dictatorial o totalitario de la izquierda. Hace unas semanas veíamos al nuevo y flamante presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, -al cual la mayoría de los andaluces ni tan siquiera conocen-, decir que Internet está copado por la extrema derecha y hacía un llamamiento a invadir la red. Paradójicamente, el Sr. Griñan pertenece al mismo partido que fulminó a los responsables del blog Cádiz socialista por criticar la gestión de su propio partido en esa provincia. Sin embargo, aunque eso si, a sueldo del partido, pondrá a una persona según él para invadir la red en la nueva ejecutiva del PSOE-A.


Y es que si hay un ejemplo claro de liberalismo en este mundo, es la propia red internauta. Cualquiera puede emitir su cadena de radio, televisión, blog personal, periódico online o demás en la red, sin tener que pedir permiso o licencia para ello. Todo esto escapa al control gubernamental y por lo tanto es antisocialista o liberal. ¿Cómo responden los socialistas a esta libertad de expresión de la ciudadanía? Controlando la red que es lo que pretenden, pero mientras éste llega, porque controlar Internet es totalmente imposible a día de hoy, como bien define el propio Griñan, hay que invadirla de socialismo. Eso si, solo por aquellos que sigan las consignas del partido a pies juntillas, y los que no, ya hemos visto sus consecuencias.


La cabra siempre termina tirando para el monte, y este es un claro ejemplo de la noción de libertad que tienen en el seno socialista y como no podría ser de otra forma, sus medios afines.


De momento se les resiste el control, así que yo mientras pueda seguiré oyendo a Federico Jiménez Losantos por las mañanas, a José Cosín a mediodía, a César Vidal por las tardes, y por las noches si me quedan ganas, a Carlos Cuesta en Veo7.


Mientras en esta España rota por las autonomías, quede una pizca de libertad, seguiré disfrutando de ella. Aunque eso si, porque soy consciente de ello, hasta que los socialistas me lo permitan.

viernes, 19 de febrero de 2010

GANÓ ZAPATERO, RAJOY, Ó…

Este miércoles pasado, hemos tenido oportunidad de ver el debate sobre economía en el congreso y como siempre suele ocurrir, hubo más de lo mismo. El presidente del gobierno encantadísimo de haberse conocido, proclamando por enésima vez que la recuperación económica está cerca, que la recesión está a punto de desaparecer y que la creación de empleo vendrá de la mano pasado el primer semestre de 2.010. Así lleva ya seis meses con la cantinela, pero él erre que erre, –recuerde el lector que el segundo semestre comienza en Junio, mes habitual por excelencia en creación de empleo-. Pero no solo eso, Zapatero además salió airoso del debate, retando al líder de la oposición a presentarle una moción de censura, al ver cómo éste, espetaba a los propios diputados del PSOE a retirarle su confianza al presidente. A veces creo que “el bueno” de Mariano es nuevo en estas lindes, porque una persona de semejante experiencia política y teniendo el cargo que ocupa, no puede caer en esas simplezas, y más a sabiendas de que Zapatero es un púgil rápido y contundente en su respuesta. La contra respuesta del presidente se puede imaginar, como ya he dicho retó al líder de la oposición a presentarle una moción de censura si tenía “valor”. La respuesta de Rajoy, penosa. Y eso que el presidente se lo puso fácil al hacerse él y su gobierno responsables del índice de desempleo en España. No obstante, he de decir que la primera exposición de Rajoy, fue brillante como siempre, pero después como suele ocurrirle, cuando el presidente usa la demagogia y la manipulación para soltarle un buen par de directos de izquierda –nunca mejor dicho- a la barbilla, el líder del PP responde siempre con “sutilezas y blandenguerías”. Y no es que quiera yo que la dureza se vuelva un ingrediente inexcusable en D. Mariano, no, pero es que cuando hay que ser duro y hay que dar la cara, por uno mismo y por los españoles que lo están pasando mal mientras el presidente se da a sí mismo golpecitos en la espalda, pues hay que serlo.


Pero no quiero centrar mi artículo en los dimes y diretes que se trajeron el presidente y el líder de la oposición. Y es que hubo una diputada, única representante de su partido en el congreso, que aunque no cuente con mi mejor opinión fue la única que puso los puntos sobre las íes en el debate, señalando y aclarando cuál es la raíz del problema en España, de su crisis económica, institucional y política. Fue la diputada por UPyD, Rosa Díez.


La diputada dijo que ni ni PP ni PSOE quieren revisar la ley educativa, porque tienen 17 leyes distintas, tantas como comunidades autónomas existentes, y mientras eso continúe así el ministro Gabilondo no podrá hacer nada al respecto. También criticó la ley electoral, la cual garantiza a ambos partidos la alternancia en el poder. También señaló que ni PSOE ni PP están dispuestos a reformar la justicia para que esta sea eficaz e independiente. Según la diputada, ambos se sienten a gusto asignando magistrados para intentar controlarlos después. Viva Montesquieu –esto último obviamente son palabras mías-.


Hizo hincapié en que lo que España necesita, es algo tan importante como reformar el modelo de estado. Y que la forma de hacerlo es llegando a un pacto en cómo llevarlo a cabo. Y es que según Díez, España tiene una crisis institucional y política, lo cual suscribo literalmente y así creo que opinan la mayoría de los españoles. Acusó al presidente del gobierno de haber perdido dos años, y le espeta de no ser competente para abordar y liderar el pacto que España necesita. Le dijo que los ciudadanos tienen derecho a un gobierno que lidere, que se anticipe a los problemas, que los aborde con rigor, que se comprometa y deje de echar la culpa a los demás por los males que nos aquejan. Le espeto a que si no sabe hacer nada más de lo que está haciendo, que convocase Elecciones Generales. Ni el mismísimo Mariano tuvo el “valor” o los cojones –permítaseme el casticismo- de hacerlo. Terminó diciéndole que los españoles tenemos derecho a salir de esta crisis con un gobierno que tenga ambición de país y sentido de estado. Y es que en mi opinión, es la única forma de llevar la salida de la crisis a cabo. La económica, la institucional y la política.

Y es que Rosa Díez tiene razón. Mientras estamos debatiendo sobre reformas en las pensiones, la de los ciudadanos, claro, las comunidades autónomas se gastan un dinero que no tenemos y su financiación es totalmente –usando una palabra que le gusta mucho al presidente- insostenible. Estamos aquí mareando la perdiz cuando no queremos ver la realidad del momento y el fondo del problema, y es que algunos aún no se atrevan a verlo o decirlo, y Rosa Díez sin decirlo literalmente lo ha dejado lo suficientemente claro. Necesitamos que haya una España y no veintiuna. España está rota. El sistema como hoy lo conocemos con sus nuevos estatutos de autonomías, con sus sistemas fiscales, financieros, educativos, sanitarios, etc… cada cual por su lado, no funciona. No podemos ser diecisiete, tenemos que ser uno. Esto no quiere decir que esté abogando por un sistema centralizado ni mucho menos, sino por un sistema válido, donde las comunidades autónomas dependan del estado y no el estado de las comunidades autónomas. Suscribo el discurso de Rosa Díez porque es ahí donde radica la raíz del problema en España. Muchos lo vimos venir hace tiempo y nos tacharon de exagerados. Ahora tenemos debates y denuncias en comunidades autónomas como Cataluña y Valencia, gobernadas por PSOE Y PP respectivamente, donde los niños no pueden estudiar en la lengua oficial, el español. Es lo que tenemos, y mientras no comencemos por arreglar el problema desde su raíz, los parches y arreglos que queramos hacer, no servirán absolutamente de nada.


Y es que aunque como he mencionado anteriormente, no esté de acuerdo con el ideario de Rosa Díez, y sé que tiene cosas en su pasado de las cuales no quiero acordarme, he de decir que suscribo su discurso del miércoles pasado, y que ese día no ganó el debate ni Zapatero ni Rajoy. La ganadora por K.O. técnico y por su valentía política, fue Rosa Díez. Aunque eso si, los perdedores del mismo fuimos los sufridos ciudadanos, que viendo a esta banda política no vemos solución a las crisis que nos azotan, porque las posibles soluciones ya mencionadas ni están, ni de momento se las espera.

sábado, 13 de febrero de 2010

ZAPATERO EL RESENTIDO

Hay pocas cosas en la vida que me conmuevan tanto, como una víctima del terrorismo. En España en sus múltiples casos, todas ellas, no se les puede denominar con otra palabra que; RESPETO. Ellas dan significado a esa palabra porque en ningún caso hemos visto de ellas una mala acción, ni tan siquiera un mal gesto. Lo único que piden todas al unísono se puede explicar en dos frases que han hecho slogan; memoria, dignidad y justicia, y que no se olvide lo inolvidable. Personas que han pasado por el trauma tan tremendo de perder a un familiar querido a manos de esas sanguijuelas, o verse afectado físicamente y mentalmente de por vida, sólo piden que el gobierno, la sociedad y la justicia les concedan esas cuatro peticiones convertidas en dos frases.


Esta semana se ha celebrado en Salamanca el VI Congreso Internacional de Víctimas del Terrorismo, donde se han reunido más de 400 víctimas del terrorismo provenientes de todo el mundo y que ha contado con una presencia masiva de víctimas del terrorismo de toda España. No podría ser de otra manera ya que en nuestra nación tenemos desgraciadamente una dilatada experiencia en este tema. Desde el jueves hasta hoy sábado se han hecho distintos eventos donde han intervenido víctimas y personalidades de la política. La inauguración estuvo presidida por los principies de Asturias. El objetivo de este congreso no era otro que el que las víctimas no caigan en el olvido, pero sin embargo, la persona que más representatividad ha de tener con las víctimas, ha faltado. Su nombre José Luis Rodríguez Zapatero.


El presidente del gobierno de España, un congreso más, ha faltado a su cita inexcusable para con las víctimas de esa lacra que en España sobre todo, nos azota de manera extraordinaria. El gobierno en el pasado reciente tuvo sus más y sus menos con la antigua dirección de la asociación que aglutina a más víctimas en España, la A.V.T. Estando su presidente Francisco José Alcaraz a la cabeza de dicha asociación y estando el gobierno negociando con ETA, fueron los que apoyados por el Partido Popular movilizaron a muchos ciudadanos en las únicas manifestaciones contra una decisión del gobierno, que no contra el gobierno. Memoria, dignidad y justicia era su slogan de manifestación. No estaban dispuestos a que se alcanzase una mal llamada “paz” con la banda de asesinos que habían matado y mutilado a sus seres queridos. Vimos como por parte del gobierno se instaló el más silencio absoluto cuando se denominaba a esta asociación y a su presidente de “extrema derecha”.


El resentimiento de Zapatero desde entonces continua intacto, y este año tampoco ha tenido la decencia política y personal, de asistir a tan importante y emotivo congreso al que sin embargo, si ha estado presente personas como el ex presidente del gobierno José Mª Aznar, el cual fue aclamado por los presentes, gritándole y pidiéndole que volviera. Y es que no se trata de color político, se trata de que ese presidente siempre estuvo al lado de las víctimas como no puede ser de otra forma, y hoy esas personas, esas víctimas del terrorismo a las cuales le debemos tanto, se merecen como mínimo una gran dosis de RESPETO, y que la más alta representación de ellas por parte del gobierno de la nación que es el presidente del gobierno, esté junto a ellas. La presidenta del parlamento vasco, Arantza Quiroga pidió disculpas entonando el mea culpa, porque según decía y con toda la razón; "Los políticos no hemos estado a la altura de las circunstancias". Aunque es verdad que unos menos que otros.


Actos como este dejan pequeños acontecimientos tan importantes como los que estamos sufriendo en nuestro país como la crisis económica o incluso la de desempleo. Ningún medio de comunicación exceptuando libertad digital se ha hecho eco de esta noticia, y es que parece que un hecho tan grave no merece portada de prensa, tv o radio. Puede que porque nos hayamos acostumbrados a este desplante del presidente del gobierno a las víctimas, congreso tras congreso.


Tenemos el peor presidente de la democracia, pero peor aún es tener al presidente menos solidario. Más aún cuando es de esto de lo que más presume.

lunes, 8 de febrero de 2010

LAS PENSIONES

Una prueba más de que el repartimiento de riqueza, o dicho en una palabra el socialismo no funciona, es el tema de las pensiones públicas en España. Hay muchos contribuyentes que piensan –los más jóvenes y/o los más ilusos- que el dinero que ellos hoy pagan se queda ahí para mañana tener su futuro asegurado, y no funciona así. A la vista está que el dinero que hoy pagamos sirve para pagar las pensiones actuales y no las nuestras futuras. De tal forma que según está estructurado el sistema, las cotizaciones de hoy pagan las pensiones a nuestros abueletes de hoy. Ellos también cotizaron entonces para pagar las pensiones, al igual que hacemos nosotros hoy por ellos. Recordaremos que este sistema es heredado del propio franquismo y aunque ha tenido alguna reforma, el sistema sigue intacto al implantado durante aquel régimen.


En los últimos días hemos visto que el gobierno está intentando una reforma en la cual cambiarían algunos ingredientes, es decir, el número de años cotizados, edad a partir de la cual se puede una persona jubilar, calculo de las bases para la pensión, etc… Como he dicho anteriormente, ingredientes que forman un plato insostenible, y que por lo tanto no servirá de nada. Un ejemplo claro es elevar la edad para jubilarse a 67 años en lugar de los 65 de hoy. Ojalá fuese tan sencillo como hacer ese simple cambio, pero no, eso es solo una engañifa. El gobierno que pretende ese cambio y que no se admitan las prejubilaciones, es el mismo que jubiló a empleados con 52 años en RTVE. Por lo tanto su credibilidad y su autoridad en este tema es muy poca. Y la confianza a la que tanto elude, cero.


Y es que el gobierno está ahogado por la situación económica y por las reprimendas que recibe desde Bruselas. Esta semana pasada hemos visto también como personalidades destacadas en el PSOE como el comisario de asuntos económicos de la UE Joaquín Almunia, ponía al mismo nivel a Grecia y España. Y el presidente de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha, José Mª Barreda recomendaba al presidente Zapatero un cambio de gobierno, cosa que ha sentado muy mal en las filas socialistas persistiendo en su arrogancia y en no querer aceptar que no se están haciendo las cosas bien. Ya que por lo visto todos los agentes económicos están equivocados menos la ministra Salgado. Ya pasaba antes lo mismo con Pedro Solbes.


Pero el problema de las pensiones venía ya de lejos. Importantes economistas alertaban desde hace tiempo de que este sistema era inviable si no se realizaban importantes reformas. Reformas que llegan ahora en su peor momento y las cuales no son las mejores iniciativas para arreglar ese problema. La economía está en su peor momento y no tenemos precisamente a los mejores tecnócratas en el gobierno para ayudar a salir de la crisis. Creen que pidiendo toneladas de optimismo y confianza arreglarán las cosas, sin embargo, no consiguen más que su efecto contrario. Pues equivocan el concepto. Ya que la confianza no se pide ni se exige, la confianza se gana a pulso, y lo que provoca este gobierno cometiendo errores y dando palos de ciegos como en el tema de las pensiones, donde había muchas propuestas que al no ser acogidas por los sindicatos, directamente han sido retiradas, es la desconfianza de todos.


Me sorprende mucho que ningún político o agente económico hable de una reforma profunda del sistema de pensiones. Reforma profunda a la que algunos llaman pero que queda ahí, en el título. Porque como he dicho anteriormente, de lo que se habla es de cambiar ciertos ingredientes de un plato que de por sí continuará siendo insostenible. Y es que un sistema de pensiones conocido como sistema piramidal, el cual se sustenta sobre el número de cotizantes, siendo España un país donde cada vez se llega a una mayor longevidad y por lo que vemos, cada vez disminuye más el número de cotizantes, es un sistema que no se puede sostener de ninguna forma. El debate serio, pero que ningún político abrirá por lo políticamente incorrecto que puede llegar a ser, y ya sabemos que los políticos están para captar votos, no para gestionar bien nuestro dinero y sacarles el mayor rendimiento, es la privatización parcial de las pensiones. Y no estoy hablando de privatizar de un sablazo el sistema, estoy hablando de comenzar un sistema donde al ciudadano o cotizante se le dé la libertad de elegir. Un sistema mixto donde el ciudadano pueda elegir si quiere cotizar en el sistema público de pensiones o por el contrario hacerlo en una sucursal privada por su cuenta. Está claro que al principio al ciudadano le daría vértigo tal opción, y no serían demasiados “imagino”, los que optarían por dejar de lado el sistema público, pero con el tiempo, al aumentar la demanda de los planes de pensiones, aumentarían las ofertas y las financieras mejorarían poco a poco sus productos ofreciendo mejoras y más beneficios para el perceptor. Estoy seguro que poco a poco el sistema privado terminaría desbancando al público, aunque eso nos llevaría alguna que otra década. Esto sería abrir un debate serio y comprometido precisamente con los ciudadanos, ofreciéndoles la libertad de poder elegir entre un sistema u otro, y dejando lo que se ha convertido en un sistema obsoleto, tanto como el propio régimen que le dio nacimiento. Pero esto es mucho pedir de una casta que en sus preocupaciones personales e individuales no se encuentra desde luego el futuro, ya que ellos cuentan con unas pensiones “PRIVILEGIADAS”. Aunque algunos aún se empeñen en negar lo evidente.


El sistema de pensiones o jubilación ha quedado obsoleto, tanto como el propio socialismo que intenta protegerlo. Y en este caso meto en el mismo saco a socialistas y populares, porque ambos están en lo mismo. De hecho, un sector de los socialistas conocido como los guerristas, abogan por un gobierno de salvación con el PP. Apañados estamos.


Y es que mientras que el sistema de pensiones se sostenga del número de trabajadores que coticen, siendo este tan basculante en nuestra economía nacional, siendo ahora nuestra tasa de desempleo del 19,5% siendo ésta la más alta de la OCDE, siempre tendremos este problema. Problema que ante un asunto tan importante, no nos podemos permitir. Por nuestros mayores y por nosotros mismos.