EL CAMIÓN ARDIÓ.

Es interesante comprobar los bálsamos semánticos por parte de algunos presentadores informativos, para referirse al hecho acontecido esta semana tras la huelga de transportistas en España. Por cierto, paro patronal, no huelga obrera como intentan hacernos ver. Aunque la patronal no deje de ser obreros por cuenta propia, pero hay que llamar a cada cosa por su nombre. Resulta que el camión que ardió con su conductor dentro esta semana, simplemente “ardió”. Parece ser que el camión se echó a arder sólo o puede que incluso fuese su conductor el que le prendiera fuego, no sólo a su camión con él dentro, sino a cuatro más que estaban estacionados junto al suyo. Porque, ¿cinco camiones se pueden incendiar solos? Parece que no, y si en una huelga de transportes, no han sido los “piquetes informativos” habrá sido él mismo en un momento de locura transitoria. Nótese la ironía.

El conductor al menos, podrá respirar tranquilo al comprobar que las heridas producidas en tal incendio fueron producidas por algún infortunio, y no por algún compañero de profesión denominados “piquetes informativos”. Infortunio que no solo produjo el incendio en su camión sino en cuatro más, pero que gracias al bálsamo semántico proporcionado por los presentadores del telediario, queda en eso, en un simple infortunio. Ya que como dicen ellos “ardió”.

Ya me extrañaba a mí que un compañero por muy piquete informativo que fuese, pudiese producir tal daño a un compañero de profesión. Al igual que al camionero que según Pérez Rubalcaba sólo le habían dado una pedrada, o al camionero de Algeciras, que tratando de salir del puerto, le rompieron la luna de su camión y pincharon las ruedas, claro eso entre compañeros es imposible pensar que pueda hacerse. Eso también fue algún infortunio.

Los transportistas tienen derecho a quejarse y protestar, ¡faltaría más! Pero no a realizar actos violentos o a cortar las entradas a las ciudades simplemente “porque yo lo valgo”. Hemos visto como en España el chantaje, la coacción y los incendios salen gratis cuando éstos se producen por parte de trabajadores, “patronal” en este caso. Ellos piden unas ayudas ante el aumento de precio del carburante, pero y ¿qué hay de los demás? Yo necesito mi coche para ir a trabajar, antes tenía con 70€ para echar el mes, ahora con 120€ me falta. Si ayudamos a los transportistas, habremos de ayudar también al gremio de la construcción, o al de la hostelería, y así un largo etcétera, ya que somos muchos los que estamos en crisis, porque resulta que nos encontramos en crisis económica, aunque el gobierno aún se niegue siquiera a pronunciar tal palabra. A golpe de talonario no se arreglan las crisis, al revés, se empeoran, pues nos comemos el superávit del estado que tanta falta nos va a hacer para paliar dentro de lo posible esta situación.

La gestión de la huelga por parte del gobierno ha sido nefasta, del “ha sido una simple pedrada a un camionero” por parte del Ministro Rubalcaba, hemos pasado a lo que hemos visto esta semana. Pero es que claro, que un gobierno socialista eche a la calle a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, para defender a los ciudadanos de unos trabajadores que luchan por sus derechos aunque sea de manera coaccionadora, es siempre complicado. Lo vimos en el aeropuerto del Prat en la pasada legislatura, cuando algunos trabajadores tomaron las pistas del aeropuerto produciéndose un peligroso hecho, y ahora, más de lo mismo.

Como siempre, el gobierno socialista beneficiará a unos pocos, haciendo una política discriminatoria, estamos hartos de verlo, en la pasada legislatura tenemos el ejemplo del cheque bebé, que si tu hijo había nacido a partir de un día en concreto “creo recordar el 01 de Junio” tenías derecho a subvención, si había nacido anteriormente, incluso el día antes, no.

Pero entonces, ¿cuál puede ser la solución acertada y equitativa para todos, dónde ninguno salgamos perjudicados o discriminados? Pues es fácil, disminuir los impuestos, el ciudadano paga por el carburante un 70% de impuestos por litro de GASOIL, yo creo que es más que suficiente. Todos echamos la culpa a la subida del petróleo, pero nadie se para a ver que el precio del GASOIL se ha puesto por encima del de la gasolina, cuando siempre ha estado muy por debajo. Por lo tanto aunque la razón de peso sea la subida del petróleo, me da que algo tiene que ver la ley de la oferta y la demanda en este caso. El parque móvil español cuenta con el 70% de vehículos de GASOIL. Parece que más que la subida del barril de crudo, entra la ley de mercado de “la oferta y la demanda”. Sólo tenemos que fijarnos en que el único carburante que más ha faltado en estos días en las gasolineras ha sido el GASOIL. Lo que ayer era barato, hoy debido a la demanda y no al precio del crudo es caro. ¿Nos rebajará a todos los impuestos el gobierno dónde todos salgamos beneficiados, o como siempre tomará alguna solución “socialista” donde unos pocos tengan que agradecerles eternamente la subvención aportada mientras somos otros los que los subvencionamos con más impuestos?

La ex primera ministra británica Margaret Thatcher, decía dos cosas muy a tener en cuenta en estos dificiles momentos de crisis, las cuales son;

La inflación es la madre del paro y la ladrona de los que han ahorrado. Y Cualquier mujer que entienda los problemas de llevar una casa está muy cerca de entender los de llevar un país. Cualquier mujer ama de casa, sabe que ante un inminente tiempo de crisis, ha de reservar el dinero ahorrado en tiempos de bonanza económica, para superar la nueva situación, y no gastarlo alegremente, ¿verdad señoras? Aquí se está haciendo precisamente lo contrario. La semana pasada vimos a Z llamando al Presidente del Banco Central Europeo, Sr. Trichet a la prudencia, por volver a subir una vez más el EURIBOR. Se ve que las dos tardes de lecciones económicas con Jordi Sevilla le sirvieron de bien poco, ya que contra lo que piensa el Sr. Z, el Banco Central Europeo no es el que sube el EURIBOR según le fluye, sino gracias a políticas inflacionarias como las del sr. Z en España. Sin embargo se envalentona a llamar a la “prudencia”, él.

Los españoles pusimos de nuevo al frente de nuestros dineros, al gran as de la economía, Pedro Solbes, así que como dijo Churchill, tenemos el gobierno que nos merecemos, y lo que haya de venir, nos lo tendremos bien merecido.